Un estudio ha revelado que la práctica del Tai Chi, un antiguo arte marcial chino que implica realizar movimientos lentos y controlados, puede frenar la progresión de la enfermedad de Parkinson en personas mayores.
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La enfermedad de Parkinson es una afección que afecta el sistema nervioso, en particular las células nerviosas en el cerebro que controlan el movimiento, provocando temblores, rigidez y lentitud. Actualmente no existe cura para la enfermedad, pero los tratamientos buscan aliviar los síntomas.
Según el estudio del Diario BMJ de Neurología, Neurocirugía y Psiquiatría, los pacientes que ya habían sido diagnosticados con la enfermedad y habían incorporado el Tai Chi en su rutina requerían dosis más bajas de medicamentos necesarios.
Además, la investigación también mostró que el Tai Chi puede brindar beneficios a largo plazo, mejorando tanto los síntomas motores como los no motores, como el equilibrio, la cognición y la calidad de vida. La práctica del Tai Chi es accesible y consiste en movimientos sencillos, lo que la convierte en una opción viable para los pacientes con Parkinson.
